Gira: Realimentación y violencia simbólica

Contentos por esta experiencia.

Esta semana realizamos una gira al Museo de Arte Costarricense (MAC) y al Museo de Arte y Diseño Contemporáneo (MADC) para realimentar los procesos creativos que los y las participantes están desarrollando mediante la apreciación de obras de arte. Posteriormente, realizamos una observación participante en el Mall Multiplaza Escazú para analizar las dinámicas de consumo y violencia simbólica que dan en este lugar.

En la primera parte de la gira, tuvimos la oportunidad de apreciar exposiciones como Código de Pasión de Pedro Arrieta en el MAC. La cual se caracteriza por utilizar expresiones del arte popular para  representar  las condiciones de dominación social (tal como lo indica la información de la curaduría de la muestra). 

Entre las técnicas utilizadas encontramos  el grabado, la serigrafía y lo objetual, que forman parte del lenguaje artístico que utiliza Arrieta. Nos llamaron la atención tanto las obras que presentaba la muestra como sus colores, sus texturas y las formas que incluían.

Lo cotidiano como arte

Tomamos anotaciones
sobre ideas presentes en las obras de arte. 

Los momentos lúdicos siempre forman parte de nuestro aprendizaje.

En el MADC pudimos apreciar la exposición Proyectos Ultravioleta, donde las creaciones se vinculan con el día a día (según la propia información que nos ofrecía en museo en sus salas). Estas obras nos permitieron apreciar nuevas formas de relacionarnos con la producción cultural. En este sentido, la naturaleza como arte capturó nuestra atención y nos generó una actitud más propicia hacia la experiencia cotidiana.

Los audiovisuales son una técnica utilizada
en la exposición la naturaleza de forma única

Nuevas formas de relacionarse con la naturaleza.

La naturaleza como arte.

En la segunda parte de la gira, visitamos Multipliza Escazú, pero no se nos permitió obtener un registro fotográfico por las medidas de seguridad de ese centro comercial. Observamos cómo, en el trayecto del centro de San José a Mall Multiplaza Escazú, cómo se iban configurando espacios urbanos con mayores ofertas materiales y símbolos, pero al mismo tiempo más excluyentes. Algunas de las personas participantes caracterizaron al Mall como un espacio sin cualidades donde las marcas se suman a la uniformidad y los muros cierran el recinto a perspectivas exteriores, un espacio donde todo lo que está a la altura de la vista debe llamar la atención y verse sofisticado, aunque la estructura del centro comercial sea sencilla.

Al ingresar a varias tiendas en el centro comercial pudimos analizar las diferentes dinámicas de consumo dependiendo de las marcas y las personas que suponían que entrarían a comprarlas. En Forever 21, notamos que los consumidores en su mayoría eran chicas jóvenes que buscaban ropa a la moda. Vimos que esta contaba con deficiencias en su confección según nuestras observaciones y los conocimientos que hemos ido desarrollando en nuestra experiencia con nuestras propias prendas. Del mismo modo, encontramos que la tienda Zara ofrecía la ropa a  precios muy elevados que no iban de acuerdo con la calidad.

Además, pudimos observar cómo algunas tiendas vendían una imagen en relación con algún deporte o subcultura con la cual los jóvenes podríamos identificarnos o al cual querríamos vincularnos a partir de la ropa. Tal era el caso de la tienda Arenas Skate & Surf, donde se vendían prendas de marcas que son consumidas principalmente por hombres jóvenes. 

Contrario a los ejemplos anteriores, hubo una tienda en Multiplaza Escazú donde algunos de nosotros consideraron que los precios podrían pensarse como razonables según la calidad de la ropa; comentaron que el patrón de consumo de las personas era diferente al de las otras tiendas; y, observaron que los productos de la tienda eran para diferentes tipos de consumidores (no sólo para jóvenes).